Lo que (de verdad) nadie te dice de vivir sola

depa de soltera lo que nadie te dice de vivir sola

Vivir sola es una aventura que parece sacada de una película: la independencia, el control total y la libertad de hacer lo que quieras, desde decorar tu espacio como siempre soñaste hasta bailar en pijama a las 3 a.m. sin rendirle cuentas a nadie. Pero, más allá de ese sueño idílico, la vida independiente trae consigo retos que no siempre te cuentan. Y no es que sea difícil, es que es diferente.

De repente, pasas de tener todo resuelto en casa de tus papás (como la comida en la mesa o la ropa limpia) a descubrir que hay tareas que nadie hace por ti. Y eso está bien, porque justo en esos momentos empiezas a notar cómo creces y te vuelves más fuerte. Vivir sola se convierte en una combinación única de emociones: emoción por el futuro, miedo a lo desconocido y satisfacción por cada pequeña victoria, como aprender a cambiar un foco o sobrevivir al primer pago de servicios.

Es un proceso que nadie puede explicarte del todo, porque cada experiencia es única. Pero, como todo viaje, vivir sola tiene sus luces y sus sombras, y son esas pequeñas verdades las que hacen que esta aventura sea especial. Así que aquí te van algunas cosas que seguramente nadie te ha contado… hasta hoy.

1. Vas a amar esos fines de semana sin salir

Cuando te mudas sola, seguro juras que vas a organizar fiestas todo el tiempo, salir sin rendir cuentas y hasta quedarte fuera toda la noche (sí, suena increíble, lo sé). Pero, sorpresa: los fines de semana más memorables serán los que pases en tu depa, con tu pijama favorita, viendo Netflix y disfrutando el silencio. Aprendes a amar tu espacio… y tu tiempo contigo misma.

 2. Tu relación con tu familia va a mejorar, en serio

De repente, el distanciamiento cambia las dinámicas familiares. Pasas de pelearte por el control del control remoto a valorar esas llamadas donde solo preguntas “¿cómo están?”. Hasta las discusiones se vuelven más llevaderas cuando las vives a la distancia. Descubres que los extrañas (sí, incluso las peleas chiquitas, aunque no lo admitirías tan fácilmente). La distancia a veces fortalece la conexión.

 3. No cualquiera pisará tu depa

Uno de los mitos más grandes es que podrás invitar a quien quieras sin problema. La verdad es otra: tu cama y tu espacio se vuelven sagrados. No cualquier persona pasa esa frontera. Empiezas a valorar tanto tu intimidad que cuidarás quién entra y quién no. Porque tu depa no es solo un lugar, es tu refugio.

4. Organizarás desayunos con tus amigas y los amarás

El otro día tuve un desayuno con amigos en casa y fue lo mejor. Sí, sé que suena a plan de señora, ¡pero no importa! Compartir café, risas y extender el desayuno hasta que se convierta en comida es uno de esos placeres inesperados. Aprendes a disfrutar planes tranquilos y significativos, y esos momentos se vuelven más especiales que cualquier fiesta.

5. No hay lugar como tu propia cama

Tener la libertad de no volver a casa es genial… pero la verdad es que vas a preferir mil veces dormir en tu cama. No importa qué tan cansada llegues, nada se compara con el placer de tirarte en tu colchón después de un día largo. La sensación de hogar es inigualable.

6. Si lograste independizarte, puedes con cualquier cosa

Independizarte es un logro gigante. Dejas atrás miedos, inseguridades y aprendes a manejar responsabilidades que ni sabías que existían. Te vuelves más fuerte, consciente y madura, y con cada reto superado, reafirmas que puedes con lo que sea. Es un crecimiento que solo se entiende viviendo por tu cuenta.

7. Te interesarán cosas que antes ni te pasaban por la mente

¿Recuerdas cuando tus papás se enojaban porque subía la luz o el agua? Pues adivina qué: ahora tú también te preocuparás por esos recibos. Te convertirás en esa persona que busca ofertas y apaga luces para ahorrar energía. Es un cambio inevitable, pero te hace más consciente y responsable.

8. Rentar NO es tirar el dinero

Uno de los comentarios más desgastantes es que pagar renta es “tirar el dinero”. Nada más lejos de la realidad. Si esperáramos a comprar una casa para mudarnos, probablemente seguiríamos viviendo con nuestros papás hasta los 40. Invertir no siempre es tener una propiedad; invertir en tu independencia y bienestar también vale la pena. Pagar renta es invertir en ti, en tu libertad y en la experiencia de vivir sola.

9. No se trata de sacrificios, sino de prioridades

Olvídate de la idea de que vivir sola es un sacrificio constante. Es más bien un tema de prioridades. Antes, tu prioridad era salir de fiesta y comprar ropa; ahora, mantener tu espacio y llenar la despensa están en primer lugar. No es que renuncies a tus gustos, sino que reorganizas tus prioridades para vivir de forma más equilibrada.

10. Extrañarás tu depa más de lo que imaginas

Después de días ocupados, viajes o semanas en las que apenas has estado en casa, vas a extrañar tu espacio con locura. Te sorprenderás deseando esos fines de semana de sofá y maratón de series. Y ahí es cuando sabrás que estás haciendo las cosas bien: porque tu depa se convierte en ese lugar al que siempre quieres volver.

 La magia de vivir sola: desafíos que valen la pena

 La magia de vivir sola: desafíos que valen la pena

Vivir sola no es una lista perfecta de momentos felices ni una serie de pruebas imposibles, es un proceso lleno de aprendizajes, pequeñas sorpresas y decisiones que moldean quién eres. Habrá días en los que te sientas como toda una experta en la vida adulta y otros en los que prefieras comer cereal para no cocinar, y ambas cosas están bien.

Lo más bonito es que cada reto superado –desde aprender a manejar tus gastos hasta lidiar con el silencio de la casa– es una prueba de que puedes con mucho más de lo que creías. La independencia no solo se trata de tener un lugar propio; se trata de construir una vida en la que te sientas cómoda contigo misma.

Al final, vivir sola es como esa aventura que nunca termina: cada día trae algo nuevo, y cada experiencia suma a la persona que estás destinada a ser. Y aunque no siempre es fácil, créeme: cada paso, cada recibo pagado y cada desayuno con amigas hacen que valga la pena. Porque si algo es cierto, es que esta etapa te enseña una verdad esencial: puedes con esto y mucho más.

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(7) Comentarios

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  3. Totalmente de acuerdo.

  4. Jajaja ¡súper sí me identifiqué!
    Eso de extrañar tu depa, me independicé apenas había cumplido los 24 años, ahora estoy a días de cumplir los 25. Apenas llevo un año viviendo sola con mis dos perritos, y cuando voy de visita a casa de mis papás me doy cuenta que mi estilo de vida ya no combina con el de ellos, desde la dinámica para hacer el aseo hasta el orden en que ponen las cosas.
    También la satisfacción que sientes cuando compras aunque sea una taza, una planta un mueble o algo y saber que tú lo estás comprando, o levantarte en la noche y ver todo lo que tienes y pensar que tú solita compraste todo.
    Aunque agregaría que algo que no te dicen de vivir sola, es que hay días en que no están tan chidis, que necesitas un abrazo, con quién platicar tu día, hasta estar viendo una peli y no tener a quién decirle «no mms eso no lo vi venir» y no hay nadie.
    Igual porque llevo apenas un año sola y estoy aprendiendo a lidiar con mil cosas nuevas.

  5. Tienes toda la razón del mundo, desde que salí de mi casa habia compartido depa con roomie y hace dos semanas decidí estar sola, sin un roomie y es rotalmente distinto hasta vivir en roomie a sola totalmente, la verdad que no lo cambio por nada, todo lo que menciones es realmente la verdad, concuerdo contigo cuando mencionas que muchos dicen que pagar renta es tirar el dinero a la basura, sin embargo el hacerme reponsable de mis cosas, mis tiempos, mis gastos no los cambio por nada, he tenido un crecimiento personal y por supuesto que las cosas que tenian prilridad para mi cuando vivia con mi mamá ya casi no figuran en mi vida y prefiero mil veces estar en mi casa, mi espacio, mis cosas… En lugar de salir de fiesta y también no quiero que cualquier persona entre.
    El inicio no es sencillo, hacerte de lo tuyo no es fácil, empiezas con algun mueble prestado, algo de segunda mano y poco a poco, sin embargo valoras mas todo ya que te cuesta a ti!… Ame tu post, gracias.

    1. depadesoltera dice:

      Gracias a ti por compartir y leerme. Abrazos!

  6. Es totalmente de acuerdo con tus puntos. En todo asentía con la cabeza mientras leía. Yo adoro este estilo de vida. La unica diferencia es que yo adoro hacer cenas e invitar a mis amigos.??

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